jueves, 16 de octubre de 2014

Diabetes Mellitus: La dulce muerte

Diabetes Mellitus: La dulce muerte
En el marco del Día Mundial de la Sana Alimentación, encontramos que este padecimiento en Quintana Roo cuenta con 134 mil enfermos; los malos hábitos alimenticios influyen a que este mal crezca y los niños son los más afectados.
En Quintana Roo tenemos el 10% de la población de prevalencia en diabetes mellitus, o sea estamos hablando que son 134 mil personas, lo que se complica porque no hacemos campañas de detección, así que la incidencia puede ser mayor por los malos hábitos alimenticios, explicó la presidenta de la Asociación Mexicana de Diabetes A.C, Lilián Chagoyán.
Al cuestionarle sobre la situación del padecimiento en Quintana Roo, reveló que es un panorama triste. “Decimos que si a nivel de federación internacional de la Diabetes, si juntamos hoy a toda la población llenaríamos de tal forma un país que sería el tercero más poblado del mundo. En México hay una prevalencia y está a la alza, es preocupante. No solo vemos las estadísticas actuales de la diabetes que se hace cada cuatro años por la secretaría de salud, sino también de la obesidad que va en aumento”.
Informó que de acuerdo a los estudios, se proyecta que en el 2025 en el país habrá 16 millones de personas con el padecimiento; aunque por cada persona que tiene el diagnóstico, hay uno que no sabe y ya tiene la afectación.
Dijo que la secretaría de salud tiene buenos programas, lo malo es que a veces no lo lleva al 100 por ciento; sin embargo “nosotros tenemos que hacer la medicina preventiva, tendríamos que hacer campañas de detección de peso, talla, porcentaje de grasa, medición de cintura, medición de cadera, glucosa y presión arterial”.
MALA ALIMENTACIÓN, FACTOR DE RIESGO
Mencionó que son varias causas lo que provoca la diabetes; uno, son los malos hábitos alimenticios, pues empieza a haber un desgaste pancreático por elevación de glucosa y conforme pasa el tiempo se tienen una sobreproducción de insulina y hay un desgaste del páncreas.
“También puede ser factor hereditario y obviamente un factor de farmacología”.
Se le preguntó qué se le recomienda a la población en estos casos, delineó que la obesidad es el parteaguas de la diabetes, por ello es que la obesidad y la diabetes como enfermedades crónicodegenerativas se han convertido en una epidemia a nivel mundial y en México estamos en primer lugar a nivel de niños y segundo lugar en adultos.
En cuanto a la afectación de los infantes, se da porque se descuidan los buenos hábitos alimenticios, ya que en los hogares mexicanos se han introducido una dieta basada en azúcares refinadas, harinas blancas refinadas, grasas saturadas y esto es lo que produce la patología que es el sobrepeso.
Recomendó que la dieta esté basada en un ‘Plan de Alimentación’, donde se incluyan los siete grupos de alimentos, de los que hay que hacer una combinación y comer por porciones.
EJERCICIO, LO VIABLE
La presidenta de la Asociación Mexicana de Diabetes A.C., agregó que a esos planes de alimentación hay que agregarle los ejercicios, en un tiempo mínimo de 30 minutos por día, con tres veces a la semana es suficiente; además de su ingesta de líquidos que en las mujeres debe ser de dos litros de agua natural y en los hombres tres, a parte de los líquidos que acostumbra. Si el ser humano hiciera eso, las personas empezarían a bajar de peso y se mantendrían saludables.
También recomendó que las campañas para la detección de la diabetes la deberíamos de hacer todos, además de los que están involucrados en el sector salud como el Seguro Social, el Seguro Popular y el Issste, ya que cada uno tiene un área de medicina preventiva y ésta debería de estar haciendo estas campañas, como se hacen las de vacunación.
LAS CONSECUENCIAS
Una persona que tiene factores de riesgo, debería tener una rutina de chequeo una vez al año y empezar a modificar su cambio de hábito. Cuando ya se tiene el padecimiento entonces hay que empezar a controlar, el 70 por ciento de control depende de los hábitos, o sea el Plan de Alimentación, el ejercicio y su ingesta de agua; el otro 20 por ciento es lo que hace el paciente e influye mucho lo que son sus emociones, debemos tener siempre tener el apoyo del área de psicología, porque se produce depresión y mucha ansiedad; el 10 por ciento lo provocamos a veces a través de un medicamento por la prescripción de una receta, realmente podríamos hacer mucho sin ser tan costoso el tratamiento.
DAÑA FAMILIA Y TRABAJO
Aunque la persona es la que tiene la enfermedad, la familia tiene que animar, tienen que llevar el cambio de los hábitos alimenticios, porque no es comer tú una comida y nosotros la otra. Los miembros de la familia tienen que entender que esta es una enfermedad de acompañamiento, donde si vamos a sugerir un cambio, lo vamos a hacer todos; si vamos a caminar, lo vamos a hacer todos; a parte les va a ayudar por la parte hereditaria, porque existe la predisposición, dijo la especialista.
También el sobrepeso, la obesidad y la diabetes dañan las relaciones laborales, las personas tienen más días de enfermedad, sus jubilaciones a veces son más tempranas, tienen amputaciones; hay una merma por su depresión, por su ansiedad, a veces no duermen bien y entonces van cansados al trabajo, si necesitamos como empresas ponerle atención a este padecimiento